Derby Motoreta’s Burrito Kachimba será la próxima gran banda española

Con apenas un año de vida, el grupo sevillano, que mezcla de manera macarra rock andaluz con psicodelia, muestra una energía que arrasa a las primeras de cambio.

Nunca se sabe qué deparará el futuro para cualquier grupo que empieza, incluso para los que están ya consolidados, pero a veces es posible encontrar magnetismos extraordinarios. Derby Motoreta’s Burrito Kachimba tienen esa clase de energía artística que arrasa a las primeras de cambio. Un carácter que se sale del molde, que les hace especiales.

¿Quién es este grupo de nombre casi cómico? Derby Motoreta’s Burrito Kachimba es una banda sevillana nacida a principios de 2018 después de que sus miembros hubiesen pasado por distintas formaciones sin ningún éxito. Lo que podría haber sido la creación de una banda más dentro de la escena independiente española -también conocida como indie- surgió ya desde el principio con elementos diferenciadores: los Derby querían recuperar la herencia del rock andaluz setentero recocinandolo con psicodelia y descaro. En palabras de Dandy Piranha, cantante del grupo, el objetivo era hacer “el macarra” con ese legado al presentarlo en pleno XXI.

El experimento salió redondo. Junto a Piranha, estaban Bacca (guitarra), Gringo (guitarra), Papi Pachuli (batería), Soni (bajo) y Von Máscara (teclado y sintetizador) para dar forma a un primer disco de ocho canciones bajo el mismo nombre del grupo. El álbum, publicado en el sello El Segell del festival Primavera Sound, desprende toda la chifladura de estos chavales desde el punto de partida del melodramático rock andaluz. Es partir del universo de Triana hasta llevarlo con arrojo hasta la psicodelia moderna de King Gizzard & The Lizard Wizard. Música nada condescendiente, desbordante en decibelios y auxilios, toda una bomba para los oídos.

Derby Motoreta’s Burrito Kachimba han calificado a su música como “kinkidelia”, por esa extraña mezcla del mundo kinki y la psicodelia. Sus canciones guardan toda la bravuconería kinki, adentrándose por callejones de una intensidad inaudita como la mejor psicodelia alternativa. Es difícil hallar referentes actuales en la música española con los que comparar a este grupo sevillano, y seguramente ni falta que hace, pero en su potente sonido se pueden ver estelas similares en bandas como Pony Bravo y Rufus T. Firefly. Incluso también tienen ese quejío noise, ese cosmos andaluz desde la perspectiva del rock, tan característico de los Lagartija Nick. De alguna manera, hay hilos comunicantes entre ellos.


WWW.ELPAIS.COM