Vuelta a la época romana en Santa Pola

Un Castillo con nuevos aires. Casi 60 paradas de artesanía, alimentación y restauración conforman el Mercado Romano de Santa Pola, una forma de poner de manifiesto las raíces romanas de la ciudad, aumentar el tejido socioproductivo y ofrecer una oferta turística participativa a través de talleres, exhibiciones y oferta comercial. Durante todo este puente de diciembre, el Castillo-Fortaleza tendrá aires romanos.

Alrededor de 40 paradas de artesanía y 20 de alimentación y restauración van a ser las encargadas de descubrir todos los secretos sobre el modo de vida romana a las personas que asistan al Mercado Romano de Santa Pola, hasta el próximo domingo. En la jornada de ayer, de hecho, coincidiendo con la inauguración, hubo un espectáculo que simulaba una pelea de gladiadores, y varias atracciones para los más pequeños de la casa.

Los visitantes de las pasadas ediciones han conocido la época medieval o la vida renacentista y, en esta ocasión, van a poder explorar la cultura romana. De hecho, en el mercado, que está ubicado en el Patio de Armas del Castillo- Fortaleza, mayores y pequeños tendrán la oportunidad de presenciar lucha de gladiadores, espectáculos de fuego o exposiciones de armas. Además, como novedad, este año se incluyen talleres participativos para conocer los oficios antiguos, como acuñación de monedas, escribas o copistas, destinados a todos los públicos. También destacan los espectáculos y las exhibiciones de tiro con arco.

Como afirma la concejala de Cultura, Anna Antón, durante los días de mercado, inaugurado ayer, hay espectáculos para todas las edades, cosa que el público valora. Este mercado, que es fruto de la colaboración entre la Concejalía de Cultura y la de Comercio, continúa la linea de trabajo del Consistorio de Santa Pola en los últimos años y pretende fomentar el comercio local y de proximidad para que siga siendo un motor económico en la localidad durante todo el año y no solo en la época estival. Es decir, aumentar el tejido socioproductivo del municipio y busca desestacionalizar el turismo. Según señaló el concejal del área de Comercio, Samuel Ortiz, con este evento se pretende diversificar la oferta turísitca. Gran parte de artesanos y comercios que participan en el mercado son vecinos de Santa Pola, y lo hacen de manera gratuita, con el fin de potenciar el comercio local, siempre y cuando sus productos sean artesanos. Además, entre las diferentes paradas de época hay un estand de asociaciones municipales para que la gente conozca la actividad de las mismas.

El concejal de Comercio destaca que la realización de este mercado influye en la economía local, ya que, al realizarse en el centro del municipio, se crea un espacio de dinamismo económico y social y esto conlleva, de manera inderecta, el impulso de la economía de los bares, terrazas y comercios.

La Universidad de Alicante (UA) ha descubierto recientemente a través de tecnología georadar que la ubicación actual del mercado de viguetas, esconde debajo una ciudad romana. Además, Santa Pola tiene una arraigada tradición romana, ya que en esta época la localidad se llamaba Portus Illicitanus, puesto que era el puerto de la ciudad más cercana que era Elche. Por tanto, el mercado es una manera de poner de manifiesto las raíces romanas de la ciudad, aprovechando el patrimonio cultural que posee la localidad.